Suele causar duda, si se les da un buen
desayuno a los pequeños de la casa. ¿Por qué esa necesidad de desayunar, si
ellos no quieren? Como todos sabemos, el desayuno es la comida más importante
del día. ¿Pero sabemos el por que?
¿Qué les pasa a la PSP, al móvil… cuando la
batería se les agota? Que hay que poner a cargar, si no, no funcionan, ya que
se les ha acabado la energía. A nosotros, nos pasa lo mismo. Los alimentos nos
dan la energía que necesitamos, para empezar con fuerza el día.
Cada noche, pasamos de 8 a 9 horas durmiendo
aproximadamente, sin comer, y nuestras energías, se nos agotan. El desayuno,
nos da esa energía que necesitamos para estar atentos en clase o en el trabajo.
Además, esos alimentos que consumimos en el desayuno, nos ayudan a llegar a la
comida sin hambre.
Pero, ¿Qué componentes tiene que tener un
desayuno completo?
- Lácteos y derivados: Son imprescindibles en nuestra dieta. El componente más importante de los lácteos, es el calcio, dicho componente nos ayuda a la formación de nuestros huesos. Y los huesos de los niños, se forman cada día.
- Carbohidratos: Son las galletas, bizcochos, magdalenas, pan, etc. Los bizcochos y las magdalenas, son preferibles realizarlos en casa, ya que los industriales contienen más cantidad de grasa y azúcar.
- Frutas y zumos: Las frutas contienen muchas vitaminas y son esenciales para nuestra formación. Si no nos gustan las piezas enteras (manzana, naranja…), podemos incorporarlas en forma de zumos. Hay que ir alternando las frutas para tener una variedad en nuestras dietas. Además, cada fruta contiene una vitamina diferente. Durante el día, son convenientes tomar un puñado de frutos secos.
Muchas veces, los niños no tienen ganas de
desayunar, u otras veces, suelen levantarse con el tiempo justo, y piensan que
con desayunar cualquier cosa ya les vale. Lo que tenemos que tener en cuenta,
es que nuestros niños, tienen que desayunar con tiempo y tranquilidad, no
deprisa y corriendo.
Para conseguir su interés, podemos pedirles
que preparen con nosotros el desayuno, así ellos irán cogiendo la costumbre, y
llegara el día en el que lo prepararan ellos solos, sin tener que decirles
nada.
Otra idea, para incitar al niño a desayunar,
es realizar el día anterior algún bizcocho, magdalenas… y ponerlo para
desayunar. Así desayunaran con gusto y orgullosos. Ya que es algo que han
realizado ellos mismos.
Hay que evitar gritarles, aunque nos lleven
al extremo. Tenemos que dar la información tranquilos y sin contradicciones.
Para finalizar, el último paso del desayuno, es limpiarse los dientes y están
listos para empezar el día con fuerza!
